6/3/07

Shannon y Weaver: Un modelo de comunicación

Hablando de los procesos comunicativos en que nos vemos envueltos los seres humanos, es necesario hacer referencia a la teoría establecida por Shannon y Weaver en su artículo “The mathematical theory of communication” en donde se plantea un modelo comunicativo que resulta interesante estudiar. Para poder analizar objetivamente dicha propuesta teórica, debemos de partir de que les interesaba estudiar e identificar principalmente cómo llegaban los datos de un lugar a otro, nos les interesaba la interpretación ni que otros aspectos intervenían en la misma, como por ejemplo, los procesos de codificación y decodificación (como es el caso de Stuart Hall). Se parte del hecho de que la teoría matemática de la comunicación fue desarrollada y liderada por Claude Shannon en los laboratorios de la compañía “Bell” y fue aplicada en un principio para resolver el problema técnico de la comunicación vía telefónica, es por eso que se percibe una “linealidad excesiva” puesto que es un esquema que está basado precisamente en la forma en que se transmiten los datos a través de un auricular y además los aparatos telefónicos en tiempos de Shannon y Weaver presentaban demasiadas deficiencias, por lo que había que desarrollar un estudio riguroso que pudiera resolver sus principales fallas.

Ya entrando un poco en materia, el artículo habla acerca de los procesos de comunicación, acerca de cómo se transmite un cierto mensaje, con respecto a lo cual se plantean tres niveles de problemas en la comunicación:

1. El problema técnico (nivel A).- Tiene que ver con la veracidad en la transmisión de conjunto de “símbolos” desde el emisor hacia el receptor a través de una comunicación telefónica o radiofónica o en una transmisión televisiva. Se dice que matemáticamente en la comunicación vía radio o teléfono existe el elemento “tiempo” como una determinante en la transmisión de datos y en la comunicación televisiva se conjugan diferentes factores como el tiempo y la transmisión de las imágenes, por lo que existe la necesidad de resolver cualquier problema “técnico” que afecte la correcta transmisión del mensaje debido a las características de tiempo y tiempo-imagen que pueden afectar la recepción adecuada del mensaje en el receptor.

2. El problema semántico (nivel B).- En este caso debe de existir un conjunto de “conocimientos” compartidos entre el emisor y el receptor para que puedan realizar una comunicación adecuada. Se propone la idea de que se debe de comprobar la comunicación a través de cuestionamientos acerca de si el receptor (o el emisor) entienden lo que están conversando, aunque esto es aplicable principalmente al discurso oral, como cuando estamos hablando por teléfono y no estamos seguros de que nuestro receptor nos esta entendiendo, entonces decimos “BUENO” para comprobar si la otra persona nos está entendiendo.

3. El problema de la efectividad (nivel C).- El principal aspecto que se estudia en este apartado es comprobar el éxito (o no) de la comunicación a través de la “comprobación” de entendimiento de los mensajes por parte del receptor, es decir, que la información transmitida por el receptor se captó de manera favorable. Se busca que el mensaje enviado al receptor produzca un efecto que se represente mediante la realización de una determinada acción por parte de este.

Problemas de comunicación en el nivel A (el problema técnico)
Con respecto al problema técnico de la comunicación, Shannon y Weaver tienen una concepción “simbólica” de un sistema de comunicación en donde se propone que existe: una fuente, un mensaje, un transmisor (teléfono), una señal, ruido, una señal recibida, un receptor (teléfono), un mensaje y un destino o receptor. Hablando un poco acerca de la concepción simbólica antes mencionada, se puede decir que la fuente de información selecciona un mensaje “deseado” de un conjunto de posibles mensajes. Dicho mensaje puede ser escrito o hablado, pueden ser fotos, música, etc. Entonces el “transmisor” cambia este mensaje en una señal que se manda a través del canal de comunicación desde el transmisor al receptor. En el caso del teléfono el canal es el cable en donde “circula” la señal que es una variación eléctrica simultánea y el transmisor es el conjunto de aparatos (el del emisor y el del receptor), es decir, el teléfono es el transmisor que modifica la presión de sonido de la voz en una variación eléctrica simultánea. En el lenguaje hablado, la fuente es el cerebro, el transmisor es el mecanismo de la voz que produce una variación en la presión de la voz (la señal) que es transmitida a través del aire (el canal).

El receptor es una clase de transmisor “inverso”, que cambia la señal transmitida en un mensaje y manejando éste hacia un destino. Dentro de la transmisión de un mensaje existen ciertos elementos que dificultan el entendimiento de la información como las distorsiones de sonido, errores de transmisión, la diferenciación de tonos, etc., que, de acuerdo con la teoría matemática, son elementos que reciben el nombre de ruido.

Desde la perspectiva matemática, la información esta relacionada no tanto con el contenido sino con la cantidad de elementos que pueden ser transmitidos, enviados. En este caso, los elementos inmersos en una comunicación son denominados “bits”. En este modelo de comunicación, la cantidad de información transmitida a través de un dispositivo esta cuantificada de acuerdo con las opciones de transmisión que se puedan elegir de forma libre. La cantidad de información que se transmitirá tiene que ver con el orden lógico en que se emitirá un mensaje desde el punto de vista del emisor, es decir, él irá seleccionando las piezas o bits de información que sean los más pertinentes y el transmisor deberá de servir de forma eficiente en el mantenimiento de un proceso comunicativo efectivo.

Un concepto importante que se puede resaltar es la “entropía” que dentro de las ciencias físicas esta asociada con un situación en donde es considerada una medida del grado de casualidad o mezcla en una situación dada y la tendencia de los sistemas físicos que pueden llegar a ser cada vez menos organizados y llegar a estar cada vez más mezclados, es decir, existe una ausencia de contraste entre los elementos transmitidos (información) y el ruido (por ejemplo sonidos ajenos al mensaje principal) que puede estar presente en el canal de transmisión, lo que imposibilita un entendimiento correcto de la información que es comunicada, llegando a producir un conjunto “homogéneo” entre información relevante y ruido, que genera una muy baja calidad en la comunicación que en algún momento puede llegar a parecer algo cotidiano o normal.

Otro elemento que se ve envuelto en la comunicación de acuerdo con estos autores es la redundancia, que desde este punto de vista funciona como un auxiliar de la información para que la comunicación pueda llevarse a cabo de forma eficiente, es decir, una vez que se tiene una entropía en la comunicación, donde el mensaje o la señal se confunden con el ruido percibido, entonces la redundancia se convierte en una herramienta indispensable para asegurarse que la información sea captada o recibida de forma adecuada.

En cuanto a la capacidad de un canal de comunicación, se dice que ésta tiene que ver con la “habilidad” para transmitir lo que es producido o emitido por la fuente con respecto a una información dada. Tiene que ver con la cantidad de información que puede ser enviada a través de un “transmisor”. En este caso se toma en cuenta la cantidad de bits que se pueden transmitir así como también el tiempo que toma dicha transmisión (por ejemplo, número de bits a transmitir por segundo). Aquí se considera que la función del transmisor (aparato) es la codificación y la función del receptor será la decodificación.

A pesar de que la capacidad del canal de transmisión es importante, no hay que olvidar que la cantidad de información emitida por la fuente sobrepasa a la audiencia, entonces también se cae en problemas de comunicación por el exceso de información que es transmitida por el emisor sin importar que el canal tenga la capacidad necesaria para conducir el mensaje y esté libre de ruido, es decir, no tiene caso realizar un mensaje (ya sea visual u oral) con todos los elementos técnicos más avanzados si las personas que lo van a recibir no lo entienden.

Por último puedo decir que aunque esta visión de la comunicación es limitada, si permite analizar de forma esquemática un proceso de comunicación llevado a cabo entre diferentes interlocutores, por lo que puede ser un buen punto de partida para entender de forma muy básica algunos factores que se deben de tomar en cuenta en el momento de diseñar un mensaje dado. Citando a Weaver (en Shannon, 1964) se puede decir que “El lenguaje debe ser diseñado o desarrollado desde un punto de vista totalmente amplio que permita expresar, comunicar y entender todas aquellas cosas que el ser humano pudiera o quisiera decir”.

No hay comentarios: